GigabytGirl, un proyecto pionero que se puso en marcha ayer en la Universidad de Alicante, pretende fomentar las vocaciones informáticas entre las mujeres. 20 alumnas de institutos, de edades comprendidas entre los 13 y los 16 años, participan la experiencia, que incluye talleres para aprender a construir aplicaciones móviles, por ejemplo.
Primera jornada del campus. Fuente: UA.
Organizado por la Escuela Politécnica Superior y la Unidad de Igualdad de la UA, continuará hasta el viernes, 19 de junio, informa la universidad en una nota de prensa.
Según explicó la delegada del rector para políticas de género, María José Rodríguez Jaume, “el 85% de los empleos a corto y largo plazo van a estar directamente relacionados con los conocimientos de informática y las tecnologías, unos estudios que tradicionalmente son más elegidos por los hombres que por las mujeres, tal vez por desconocimiento”.
Con el objetivo de desmontar estos estereotipos y abrir entre la mujeres el enorme potencial de empleo que entrañan, nació esta iniciativa que se ha inspirado en actividades similares llevadas a cabo por grandes gigantes tecnológicos como Google.
Este primer campus Gigabytgirl comprende la realización de una serie de actividades lúdicas con la que las jóvenes estudiantes descubrirán la informática. Talleres de robótica y multimedia, con modelado y animación por ordenador o sobre cómo aprender a construir aplicaciones móviles a través de juegos, son algunas de las propuestas que llevaran a cabo a lo largo de una intensa semana.
En el inicio del campus, las estudiantes se mostraron muy interesadas, sobre todo, en la aplicación de las nuevas tecnologías en campos como en el de la Salud. Durante su encuentro con el rector, Manuel Palomar, éste les explicó la importancia que aspectos como la creatividad han de tener en las nuevas aplicaciones de los estudios tecnológicos.
Palomar, que les contó su experiencia en el sector -es catedrático del Departamento de Lenguajes y Sistemas Informáticos-, quiso desmontar el mito del informático huraño encerrado con ordenadores que monta y desmonta constantemente y aludió «a las enormes posibilidades vinculadas a este mundo». Según el rector, “además de ser un campo muy creativo y divertido, puede resolver muchos problemas de la vida cotidiana a través de la creación de infinidad de aplicaciones móviles, tecnologías multimedia y robóticas, que contribuyan a hacer del mundo un lugar más seguro, amable y saludable. Podéis ser lo que queráis, no hay ningún campo vetado a las mujeres, más al contrario, cada vez sois más en nuestras aulas y, en la mayoría de casos, con mejores expedientes”, afirmó.
