Brecha de género en el sector TI, ¿a qué cree que se debe? ¿Considera que está cambiando?
A pesar de todos los esfuerzos que se están haciendo, la brecha de género persiste no sólo en España sino en Europa. Se trata de un problema que está enraizado culturalmente en la sociedad, por lo que no es fácil cambiarlo de la noche a la mañana. La falta de información, los estereotipos y la ausencia de referentes femeninos contribuyen de manera significativa a esta brecha. Los estereotipos de género, que comienzan en la educación de las niñas, las disuaden de perseguir carreras en campos STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), lo que afecta su entrada al sector de TI en etapas posteriores. En las universidades hay muy pocas mujeres que optan por carreras STEM. Es algo que debemos cambiar acercando la tecnología a las niñas en edades tempranas para que puedan descubrir y desarrollar sus capacidades y habilidades. Hay que desmitificar la idea de que el TI es poco atractivo y complejo, y exponer mucho más los diferentes roles en los que puedes trabajar dentro de este mercado.
¿Cuáles son las principales barreras que debe enfrentar la mujer para mejorar su progreso profesional en el sector TI?
Hay varias barreras a las que se enfrentan las mujeres. Por un lado, hay una brecha de género que hace que haya disparidad entre el número de mujeres y hombres desde el momento de la contratación hasta en las oportunidades de progresión profesional. Inconscientemente y culturalmente en las organizaciones hay sesgos de género y estereotipos que afectan a la hora de considerar a las mujeres para puestos de liderazgo en comparación con los hombres. Hay falta de modelos a seguir en roles técnicos que desaniman a las nuevas generaciones a seguir nuestro camino, lo que redunda en una mayor brecha de género. El equilibrio entre el trabajo y la vida personal y especialmente la conciliación familiar también es una barrera que dificulta compaginar ambas responsabilidades especialmente en puesto de dirección que requieren jornadas muy intensas o cuando se requiere viajar con frecuencia. Se necesitan políticas inclusivas para abordar adecuadamente las necesidades y preocupaciones que dificultan su progreso profesional.
Personalmente, ¿has experimentado alguna vez discriminación de género en el desarrollo de tu carrera?
En mis primeros años profesionales no percibí ningún tipo de discriminación. Sin embargo, a medida que asumía más responsabilidades, observaba una cierta resistencia, no tanto una discriminación activa, sino situaciones como las de no ofrecerte la posibilidad de asumir nuevos retos mientras sí a otros compañeros. Entonces descubrí que a veces había que luchar un poco más y hacer ver de forma más proactiva que estás preparada para afrontar nuevos retos, tal y como nuestros compañeros hacen con más frecuencia que nosotras. Afortunadamente hemos avanzado mucho desde entonces y ahora percibo menos barreras, hay muchas iniciativas que impulsan la igualdad así como la mayor presencia de mujeres en equipos de liderazgo y en consejos de administración de las empresas pero hay que seguir luchando.
En la organización que trabajas actualmente, ¿Qué iniciativas se han tomado para mejorar la diversidad y la inclusión?
Uno de los grandes ejes que nos mueven en Red Hat es la diversidad, y esta es la razón por la que promovemos la igualdad. En Red Hat somos conscientes de que debemos impulsar la participación de las mujeres en el sector tecnológico, pero, sobre todo, de que tenemos que promover su crecimiento profesional dentro de la empresa, y contamos con varias iniciativas. Evitar sesgos en los procesos de contratación, participar en iniciativas que fomentan las vocaciones STEM, premiar y reconocer a las mujeres en los ámbitos de open source, son algunas de las iniciativas que Red Hat impulsa para mejorar la diversidad y la inclusión.
Entrevista completa: Interempresas