La Ingeniería Informática sigue estando en una situación de agravio comparativo con respecto a otras profesiones. Es una profesión con índices de paro residuales o inexistentes, pero hay otras situaciones que están asociadas a una falta de reconocimiento profesional, porque al final es una de las pocas ingenierías que no tiene atribuciones profesionales, explica el Ingeniero Técnico Informático por la Universidad de A Coruña, Marcos Mata, al diario La Región, de Ourense.
“Para conseguir las atribuciones siempre se nos ha puesto como excusa que no era el momento. Cuando nació Ingeniería Informática no se hizo la reforma de las profesiones que estaba pendiente y no se incluyó y ahora mismo hay procesos de modificación de leyes que nos afectan, en concreto un real decreto sobre participaciones profesionales en el que se recoge qué profesiones tienen estas atribuciones. La solución es muy sencilla porque no estamos pidiendo ser más que nadie, sino estar como el resto o que se cambien las condiciones para todos. Lo que no se puede es jugar en un mercado donde el que estudia Ingeniería Informática no tiene esas atribuciones que tiene un ingeniero industrial o de telecomunicaciones” añade Mata.
Añade que el reconocimiento de la profesión se mejoraría mucho con la asignación de atribuciones profesionales. Un ejemplo sencillo es que cuando una administración pública saca a concurso un puesto de informático hoy en día cualquier titulado puede acceder. “Nosotros pretendemos que se contrate a un profesional con una ingeniería específica en esa materia”, concluye Mata.