Conferencia de Directores y Decanos de Ingeniería Informática

Los ciberataques disparan la demanda de ingenieros informáticos

La Universidad Rovira (URV) de Tarragona no da abasto para cubrir todas las plazas de informática que le reclama la industria. Los estudiantes de informática reciben ofertas de trabajo dos años antes de acabar. Las amenazas en la red suben y se reclaman perfiles ligados a la seguridad, informa el Diari de Tarragona.

Los alumnos de ingeniería informática, telemática y telecomunicaciones se han convertido en piezas codiciadas por todo tipo de empresas, desde pymes a grandes compañías, en pleno boom del internet de las cosas y bajo la amenaza creciente de los ciberataques a escala global.

En tercer curso el estudiante puede tener ya varias ofertas sobre la mesa, como indica Jordi Castellà, director del Departament d’Enginyeria Informàtica i Matemàtiques de la URV. La URV no puede cubrir todas las plazas que la industria reclama. «En las reuniones con el clúster TIC nos dicen que no pueden crecer suficientemente porque no producimos bastantes informáticos para abastecer sus necesidades», define Castellà.

El resultado es que cursar algunos de estos estudios supone tener el trabajo asegurado una vez se acabe el grado. «Hay que tener en cuenta que la informática está en todos los sitios, desde la smart city, hasta los móviles… hay muchas vertientes, ya no concebimos el día a día sin la informática», apunta Castellà.

La ciberseguridad es el nicho al alza. Episodios recientes como el estropicio provocado el virus Wanna Cry, de repercusión mundial, o el fallo informático de British Airways, han puesto sobre la palestra la vulnerabilidad de los sistemas, toda una oportunidad para explorar esta veta y poder ganarse la vida.

«La persona que pueda entender bien un ataque es alguien que se ha tenido que formar muchos años y debe conocer muy bien todas las partes de la informática, como una especie de gourmet», prosigue el docente Jordi Castellà, también miembro del grupo de investigación Crises Security and Privacy y de la Càtedra Unesco de Privacidad de Datos.

Entre ingenieros informáticos, telemáticos y de telecomunicaciones, cada curso salen de la URV unos 50 estudiantes, aproximadamente. Todos se gradúan con trabajo prácticamente asegurado.